Rendida

Rendida a esa boca
que roba mi aliento
y apenas me toca
prendida en mi cuerpo.

Lambada entre piernas
que pisan caricias
de sábana y seda.
Lazada en espiga...

Vertical en sonrisa;
que amaine en el fuego
la voz de la brisa
al amarre del tiempo.

Y en eco un gemido
del albor a destiempo.
¡Temblor de sentidos,
M.G.

@ registrado

Piel de lienzo

Mujer piel de lienzo

que ríes por tonos,
según el momento.

Arco iris de besos

que amasa colores.
Que busca destinos
pintando de flores,
las risas que brotan
en tus emociones.

Pincel de cabello

esculpe mi cuerpo
y acaricia en magenta
cada recuerdo.
Reviste mi risa
y escríbeme un cuento,
que pueda llevar
como joya en mi cuello.
M.G.

@registrado

Te esperé

Te esperé, como cada día...
La luna se fundió en su huida,
y alargó su sombra de diva.
Se dejó arropar en su partida
dejando su silla al amanecer.

¿Estas bien...?
Si, bien... ¡Pero te esperé!

No cuestiones ni imagines

lo que no debes mujer.
No pienses que conteste 
si no alcanzas a saber...

Son mis horas que te piensan

y te buscan desde ayer.
Añoran tus recuerdos,
recuerdan que te amé.

¿Todo bien...?

¿Y ahora que te cuento?
Si ya sabes cómo fue.
Ni fábulas, ni historias,
todo a medias otra vez…

Amantes al encuentro.

Figuras de papel...
Si uno baila al viento,
El otro ha de yacer.

Hazme un cráter en el pecho y...

escóndete en él. 
Y así, cuando amaine el viento...
¡Huiremos al edén!

M.G.

@ registrado

 

 

Sedúceme

Sedúceme una noche,

una oscura y sin mañana.
Blanco y negro en la mirada
que despierta este derroche
de aventura entre mi falda.

 

Y el reloj descuenta horas
cuando besas estas alas
que despliegan de tu boca 
un susurro de palabra.
¡Vuelan plumas en el alma!

 

Un paisaje de mil piernas
M.G.

@ registrado

En mis ojos

Mírate en mis ojos y dime que ves,
estás ahí conmigo desde la primera vez...
¡De ese gesto cómplice, soy tu rehén!
M.G.

Nací...

Nací descalza para sentir la tierra bajo mis pies.
Mi alma, mi vida, mi piel...
Miradas desde dentro hasta el ayer. 
M.G.

 

 

 

Derretida

Derretida... como a fuego,

temblando en este aire

que calienta hasta el suelo,

que arde en tu cuerpo

y espesa mis sueños.

Fulminada y sin seso.

Con los pies que no pisan

por flotar en tus besos.

Esos que me abrasan

y erizan al tiempo.

Y es tu piel, que me viste

en las noches heladas.

Prisionera de esa voz

que me busca...

y sin destino me atrapa 

por no verme callada.

Y en tus ojos me pierdo

con la mente descalza...

¡Enamorada tengo el alma...!

M.G.

@ registrado